¿Un remedio contra la obesidad a partir de la arena?

Hoy en día no existen muchos tratamientos contra la obesidad sin efectos secundarios, lo que suele detener a las personas con obesidad de iniciar un tratamiento, aumentando así los factores de riesgo de padecer diferentes enfermedades cardiovasculares.

Se ha comprobado que la sílice porosa puede evitar que las grasas y los carbohidratos se absorban en el cuerpo, por lo que estas partículas de sílice porosa preparadas a partir de arena purificada podrían ser la próxima terapia contra la obesidad.

Estas partículas tienen un diseño óptimo a escala nanométrica lo cual les permite absorber grandes cantidades de enzimas digestivas, grasas y azúcares presentes dentro del tracto gastrointestinal.

En un estudio in vitro se examinaron muestras de sílice en condiciones simuladas que imitaban el entorno gastrointestinal durante la digestión de alimentos ricos en grasas y carbohidratos. Se descubrió que las partículas de sílice porosa con un diámetro de poro de entre 6 y 10 desencadenan una respuesta inhibidora que impide que el tracto gastrointestinal absorba tanto las grasas como los azúcares.