Alimentos procesados y variabilidad en la presión arterial

La hipertensión arterial es un problema de salud pública a nivel mundial. El monitoreo ambulatorio es considerado una de las herramientas más precisas para obtener información de marcadores de riesgo cardiovascular.

Un nuevo estudio analizó la asociación entre las variaciones en los valores de presión arterial y el grado de procesamiento de los alimentos consumidos.

Se realizó un análisis transversal de los valores de monitoreo ambulatorio de la presión arterial obtenidos de una submuestra (N=815) del estudio de cohortes ELSA-Brasil.

Los participantes tenían entre 35 y 70 años de edad (50,7% mujeres y 49,3% hombres). Se registraron los valores de presión arterial cada 20 minutos durante el día (entre las 6 a.m. y las 11 p.m.) y cada 30 minutos por la noche (11 p.m. a 6 a.m.). La información sobre ingesta se obtuvo a partir de un cuestionario de frecuencia de consumo en el que se registró el consumo de alimentos y bebidas durante 12 meses. Además, los participantes proveyeron información sobre los horarios en que se despertaban y dormían.

Sólo 28% de los participantes realizaban actividad física moderada a intensa, mientras que el resto presentaba un grado de actividad física bajo.

70% de los participantes presentaban antecedentes familiares de hipertensión arterial y 31% declaró consumir fármacos antihipertensivos durante el estudio.

Los investigadores evaluaron a partir de estos datos, la variabilidad en la presión arterial en 24hs, la media sistólica y diastólica y la variabilidad en los períodos de sueño y vigilia.

Para valorar el grado de procesamiento de los alimentos ingeridos se usó la clasificación NOVA.

El 63,1% de la ingesta calórica diaria de los participantes estuvo conformado por alimentos naturales (no procesados), mínimamente procesados e ingredientes culinarios, 10,8% por alimentos procesados y 24,8% por ultra procesados.

Los investigadores concluyeron que el elevado consumo de alimentos procesados se correlaciona positivamente con mayor variabilidad en la presión arterial, especialmente durante la noche. Contrariamente a lo esperado, el consumo de ultra procesados se asoció inversamente con variabilidad en la presión arterial nocturna. Se necesitan futuras investigaciones que estudien el impacto de los ultra procesados en la salud y puedan ayudar a introducir nuevas técnicas de procesamiento de alimentos que conserven las propiedades beneficiosas de los mismos.