Cáncer - Publicado el 05 de septiembre de 2023
Dieta y reducción de la mortalidad tras el diagnóstico de cáncer
Modificaciones en el estilo de vida tales como una dieta saludable y la práctica regular de actividad física luego del diagnóstico de cáncer, constituyen conductas importantes a través de las cuales las personas que sobreviven a esta enfermedad pueden favorecer su bienestar y longevidad.
Un nuevo trabajo publicado en Nutrients se propuso sintetizar la evidencia existente acerca de la asociación de distintos patrones dietéticos a priori y posteriori con la mortalidad por cáncer en general y por algunos tipos específicos.
Para esta revisión sistemática y metaanálisis, se seleccionaron estudios de cohorte prospectivos o retrospectivos que analizaran la asociación del patrón dietético luego del diagnóstico de cáncer con la mortalidad general y mortalidad a causa de cáncer, cuya población estuviera formada por sobrevivientes de cáncer mayores de 18 años, con muestras mayores a 100 participantes y seguimiento por al menos 6 meses.
19 estudios de cohortes, con un total de 38.846 hombres y mujeres mayores de 18 años que sobrevivieron a 4 tipos específicos de cáncer (mama, colorrectal, próstata y ovario) fueron incluidos en el metaanálisis. La mayor parte de los estudios fueron realizados en Norteamérica. Todos los trabajos utilizaron cuestionarios de frecuencia de consumo de alimentos validados para analizar la dieta, excepto uno, que utilizó recordatorio de 24hs.
Los patrones dietéticos informados incluyeron 17 patrones distintos a priori y 2 categorías de patrones dietéticos a posteriori caracterizados por los autores en los artículos publicados como: (a) patrones dietéticos “prudentes/saludables” y (b) “occidentales/no saludables”. La categoría “prudente/ saludable” se caracterizó por incluir elevadas ingestas de frutas y verduras, granos enteros, legumbres y pescados; mientras que la categoría “occidental/ no saludable” incluyó elevado consumo de cereales refinados, carnes rojas y procesadas, huevos, grasas de mala calidad, snacks salados y dulces.
Se encontró una asociación protectora entre una mayor adherencia a los patrones dietéticos "prudentes/saludables" y la mortalidad general, frente a una menor adherencia, alcanzando un 21% menos de riesgo (HR = 0,79; IC del 95%: 0,64-0,97; I2 = 49,3%; p-valor de heterogeneidad = 0,079) entre todos los supervivientes de cáncer. La evidencia de heterogeneidad fue sustancial, pero el número de estudios fue pequeño (n=6).
Por otro lado, una mayor adherencia a un patrón dietético a posteriori "occidental/no saludable" se asoció con un incremento significativo de la mortalidad por todas las causas.
En conclusión, esta revisión sistemática y metaanálisis apoya el papel beneficioso de los patrones dietéticos "saludables", a priori o a posteriori, durante el periodo posterior al diagnóstico de cáncer en relación con la mortalidad general entre los supervivientes de esta enfermedad. Es importante continuar investigando acerca del rol de los distintos patrones dietéticos tras el diagnóstico de cáncer, para emitir recomendaciones dietéticas basadas en la evidencia, que preserven y promuevan la salud y el bienestar de estas personas.
Para más información, remitirse al artículo original: https://www.mdpi.com/2072-6643/15/17/3860
Fuente: Nutrients
Para más información: https://www.mdpi.com/journal/nutrients