Obesidad - Publicado el 30 de septiembre de 2020
Estudios comienzan a desentrañar cómo influye la obesidad en el COVID-19
No obstante, la relación entre la obesidad y la COVID-19 es compleja, y hay muchas incógnitas por resolver. El sobrepeso tiende a ir de la mano con otras enfermedades, como la hipertensión y la diabetes, que pueden hacer que sea más difícil combatir la COVID-19.
“Una nueva pandemia se está desplegando además de la epidemia en curso”, señaló Christy Richardson, endocrinóloga del SSM Health en Misuri. En cuanto a los efectos que tiene la obesidad en esta enfermedad infecciosa, señaló: “Todavía estamos aprendiendo, pero no es difícil entender la manera en que el cuerpo se abruma”.
Los especialistas señalaron que parte de la amenaza que plantea la obesidad es una cuestión mecánica: por ejemplo, las grandes cantidades de grasa pueden comprimir la parte inferior de los pulmones, lo que les dificulta expandirse cuando la persona inhala.
La grasa, o el tejido adiposo, también puede enviar hormonas y otras señales que hacen que se descontrolen las células que están cerca.
Al parecer, uno de los efectos más poderosos de la grasa es reprimir la respuesta inmunitaria inicial del cuerpo para combatir el virus, lo que permite que el patógeno se propague sin control alguno.
A la larga, los soldados inmunitarios del cuerpo se unen para actuar juntos. Pero este ataque tardío puede ser más dañino que benéfico: cuando finalmente se activan las células y las moléculas inmunitarias que tardan en llegar, se desquician y provocan episodios descontrolados de inflamaciones por todo el cuerpo.
Fuente: New York Times
Para más información: https://www.nytimes.com/2020/09/29/health/covid-obesity.html