La obesidad infantil en América Latina sera del doble en 2030, si no se cambia la tendencia.

A nivel global, los indices de niños obesos se cuadruplicaron entre 1975 y 2016, y pasaron del 4% al 18%, hoy el problema afecta al 33.6% de la población de 5 a 19 años. Se estima que la prevalencia de la obesidad en niños y adolescentes se duplicará a nivel regional para el 2023 y las consecuencias provocarán enfermedades crónicas severas, si no se resuelve esta prevalencia, las personas nacidas a partir del 2010 podrían vivir con cáncer y diabetes en su adultez.

Se infromó que una de las razones principales por las cuales aumenta de forma acelerada la obesidad es la desinformación, ya que la mayoría de los adolescentes carece del conocimiento para acercarse a una buena dieta y antes la presencia constante de comida chatarra es que algunos países comenzaron a implementar leyes para restringirla, sin embargo, el 50% del menú en América Latina corresponde a los alimentos ultraprocesados.

Uno de los resultados del desconocimiento ha llevado a los adolescentes a buscar las “dietas milagro” para bajar de peso practicando métodos peligrosos para la salud, además de que hoy en día empieza a haber una normalización de la obesidad presente en la población latinoamericana.

Especialistas comentan que la mejor forma de detener el avance acelerado de la obesidad infantil es contar con una campaña de concientización respecto a como conformar una dieta saludable desde las escuelas, informar sobre los alimentos baratos de gran valor nutricional incluyendo equipos multidisciplinarios en el tratamiento de la obesidad.