La seguridad alimentaria y el COVID-19

Antes de que la pandemia ocasionada por el COVID-19 redujera los ingresos e interrumpiera las cadenas de suministro muchos países ya presentabas altos niveles de inseguridad alimentaria debido a diferentes factores como las condiciones socioeconómicas, los peligros naturales, el cambio climático y las plagas, por lo que con la llegada del COVID-19 se ha visto un incremento grave en la inseguridad alimentaria. 

En un panorama general se puede ver como los precios internos de los alimentos van aumentando alcanzando el nivel más alto desde el inicio de la pandemia, esto combinado con la disminución de los ingresos, implica que más hogares estén reduciendo la cantidad y calidad de su consumo de alimentos. 

En 72 países, un número considerable de personas se está quedando sin alimentos o está reduciendo su consumo, esto según una encuesta realizada por el Banco Mundial creando así que la disminución de la ingesta de calorías y la nutrición deficiente amenacen los avances obtenidos en materia de salud y reducción de pobreza, podrían tener efectos duraderos en el desarrollo cognitivo de los niños.